Para poder mantener el calor dentro del agua, solo hay dos soluciones; una es con una gruesa capa de grasa, como tienen los leones marino o las morsas y otra con pelo que retenga el aire entre los pelos, como los castores y las nutrias.
Los investigadores han observado que estos animales tiene dos tipo de pelos; unos largos y finos que cubren a los más pequeños sobre la piel y que parece ser una capa protectora para evitar que el agua llegue hasta su piel, reteniendo el aire en una serie de micro-cámaras.